Para elegir la
infraestructura de carga correcta, primero identifica las necesidades de tu empresa. Considera la cantidad de vehículos eléctricos presentes, el tiempo de permanencia en el estacionamiento y las tarifas de energía locales. Evalúa si prefieres una solución de
carga rápida o de nivel 2, teniendo en cuenta costos de instalación y mantenimiento. No olvides incluir opciones de monitoreo y
gestión remota para un control eficiente de tus recursos.